Con motivo de cumplirse el pasado 28 de Septiembre, el Día Internacional del Dercho a Saber, entrevistamos al Dr. Luis Caro Figueroa, Director del sitio Iruya.com, en el programa “Salta Transparente” que se emite por Canal 2 de aire.
El destacado abogado y analista político, al ser consultado sobre la situación del derecho de acceso a la información pública en Salta y en Argentina, señaló que Argentina está atrasada en esta materia y que ve atisbos muy preocupantes de arbitrariedad y despotismo en el ámbito del Gobierno de la Provincia.
Luis Caro manifestó que “El tema de la transparencia y del acceso de los ciudadanos a la información pública, representa un giro radical en la forma de percibir y practicar la relación entre el gobierno y los ciudadanos. Es sin duda alguna la transformación más importante de los últimos años.” y que “…desde hace muchísimo tiempo los gobiernos han instaurado una cultura del secreto alrededor de sus actuaciones porque una visión simplificadora, simplista de la tarea del Gobierno, indica que mientras más se esconda, más posibilidades tiene el Gobierno de conservar el poder.”
A continuación transcribimos la entrevista. La misma puede verse en:
Gonzalo Guzmán: ¿Por qué es importante este derecho humano para el ciudadano?
Luis Caro : En la pregunta está implícita la respuesta. Porque se trata de un derecho fundamental de las personas, y estamos hablando de las personas en general, no necesariamente de los ciudadanos, es decir de las personas que están en ejercicio de los derechos de ciudadanía. Es un derecho que compete a cualquier habitante de cualquier estado democrático, y de allí su importancia.
GG: ¿Cómo ve usted la situación de Salta y de la Argentina en relación a este derecho?
LC: Bueno le diré que desde aquí, yo personalmente veo la situación con mucha pena. Es decir estoy viendo una Argentina atrasada en este materia, en materia de acceso a la información pública, y veo atisbos muy preocupantes de arbitrariedad y despotismo por decirlo de alguna forma en el ámbito del Gobierno Provincial de Salta.
A mi modo de ver, el tema de la transparencia y del acceso de los ciudadanos a la información pública, representa un giro radical en la forma de percibir y practicar la relación entre el gobierno y los ciudadanos. Es sin duda alguna la transformación más importante de los últimos años en materia de contenidos de la democracia. A nadie escapa que vivimos en una sociedad mucho más crítica, mucho más exigente y más participativa que hace 20 años y es forzoso concluir que estamos en presencia de una demanda ciudadana muy consistente en cuanto al acceso a la información pública. Tenga en cuenta Gonzalo que la información que produce el Gobierno, que producen las agencias del Estado es una información que pertenece a los ciudadanos porque ha sido recogida, recabada con recursos de los ciudadanos y es importante que los ciudadanos conozcan estas circunstancias. Es decir que la información les pertenece a ellos, es decir que nos pertenece a todos. El Gobierno, los gobiernos, desde hace muchísimo tiempo han instaurado una cultura del secreto alrededor de sus actuaciones. Alrededor de las actuaciones que debieran ser publicas han instalado una cultura del secreto y han mantenido la información cautiva porque ..en fin una visión simplificadora, simplista de la tarea del Gobierno, indica que mientras más se esconda, más posibilidades tiene el Gobierno de conservar el poder.
Le voy a contar una anécdota, esto hace unos cuarenta años atrás, el secretario de organización del Partido Justicialista de Salta, era la única persona en la Provincia que tenía un impreso de la Carta Orgánica partidaria, no había otra evidentemente, no se si la tendría también el Juzgado Federal y si era fácil en aquel momento decirle al Sr. Juez Federal que diera una copia de la Carta Orgánica. Entonces cuando había un problema interno del partido que tenía que resolverse por mecanismos jurídicos previstos en la propia Carta Orgánica, el Secretario General del Partido Justicialista, escondía en un cajón bajo llave la Carta Orgánica y nadie se enteraba lo que había allí. Ese mismo patrón cuarenta años después lo reproduce el Gobernador Urtubey, con lujo de arbitrariedades, con lujo de despotismo.